HISTORIA DE LOS CONGRESOS ESPIRITAS

0
38
COMIENZO DE NUEVA SECCIÓN

     Con este nuevo apartado, Amor, Paz y Caridad abre una puerta al pasado de nuestros predecesores espiritas que, sin duda alguna, tuvieron que luchar contra las adversidades de aquel tiempo, esquivando todos los obstáculos y poniendo rumbo firme y seguro al barco de esta gran filosofía, que es la luz que guía y muestra el camino de la perfección y el progreso.
     Nos faltarían palabras si intentáramos resaltar los valores que han demostrado en todos los momentos de su vida, pero algo es evidente: las obras están ahí. Ignorando la crítica, siempre siguieron adelante de una forma decidida y dinámica, con un reto constante: superar lo ya existente y perfeccionar todo aquello que no estaba lo suficientemente pulido, para encauzar esos conocimientos que desde lo Alto se han derramado siempre a la humanidad. 
    Dentro de esa expansión, cumplieron un papel importantísimo todos los congresos que se realizaron en diversas ciudades de Europa. Estos fueron desarrollando una doble función: la primera, mostrar a la sociedad la grandeza y esencia del Espiritismo, aclarando los vagos conceptos y, sobre todo, elevando la moral como norma de progreso y evolución espiritual; y en segundo lugar, como trasfondo, se encontraba la aspiración y el anhelo de fusionar a todos los espiritistas del mundo, acercando y estrechando cada vez más esos lazos de unión y compromiso espiritual. 
    En muestra a estos objetivos y tras constantes esfuerzos, surgió la Federación Espirita Internacional (F.E.I.), que fue apoyada y arropada desde un principio, pero que vio la luz por primera vez en el Congreso Internacional de París de 1.925, donde quedó constituida definitivamente. 
Concerniente a los congresos, la redacción de esta revista ha creído interesante ir extractando, mes tras mes, algunos de los más importantes que se han venido realizando desde 1.888 hasta nuestros días. 
    En estos congresos se pudieron conjuntar esfuerzos colectivos, conocer nuevas perspectivas de trabajo, rectificar errores, intercambiar experiencias personales y unificar ideas, lo cual hizo posible llevar a cabo realizaciones entre todos los espiritistas del mundo, evitando con ello el trabajo aislado, que siempre tiene más inconvenientes y aporta menos beneficios. 
    Consideramos que esta presentación, que vamos a hacer a partir del mes que viene, servirá para valorar este trabajo progresivo y engrandecer la obra ya comenzada.

REDACCIÓN
Publicidad solidaria gratuita