Si comenzamos a ejercitarnos en debilitar en nosotros el amor propio hasta superarlo plenamente, veremos como nuestra vida familiar, nuestra vida de relación irá cambiando sensiblemente. Cambiará, porque nos veremos libres de muchos dolores, nos veremos libres de muchas dificultades e incomprensiones que
tienen su origen en el amor propio.
tienen su origen en el amor propio.
Eliminando el amor propio que nos ciega, veremos con más claridad las necesidades espirituales de los seres que se nos acerquen; y además, no nos sentiremos heridos ni disminuidos, sean cual fueren las circunstancias que deberemos atravesar. Este ejercicio espiritual que debemos comenzar a hacer, debemos practicarlo cada vez con más intensidad. La humildad de espíritu nos ayudará en esa relación que necesitamos. La humildad nos facilitará, no solamente el avance en nuestro sendero espiritual, sino también el contacto con las Grandes Fuerzas espirituales.
Ya Sabemos que Jesús ama intensamente a los humildes de corazón. Y cuanto más humildes nos sintamos, más cerca estaremos de los elevados, más fácilmente recibiremos sus fuerzas y también más rápidamente progresaremos espiritualmente.
Necesario es que todos y cada uno de nosotros nos esforcemos en llevar a la práctica en la vida diaria, los conocimientos de elevada moral que estamos recibiendo. Debemos asimilar y practicar los conceptos contenidos en estas enseñanzas y difundirlos lo más posible; no tan sólo con nuestras palabras, sino también con nuestros hechos.
Difundamos los conceptos de moral que vamos aprendiendo en las enseñanzas que estamos recibiendo; pero, apoyemos nuestras palabras con hechos que demuestren a quienes nos escuchen, a quienes nos miren, que hablamos con conocimiento de causa; y que, además de las necesidades humanas, hay otras necesidades espirituales que todos los seres traemos al encarnar.
Y la humanidad irá transformándose, irá sutilizándose el alma humana; y la sutilización positiva del alma humana, significará la mejora de los sentimientos humanos. Entonces, en la Tierra comenzará a reinar la felicidad. Y vosotros que trabajáis para obtener ese fin, habréis avanzado en vuestro camino de progreso espiritual.
Y termina este mensaje diciendo: Necesaria es la armonía entre todos nosotros, una armonía conformada por el amor verdadero y por la humildad de cada uno. Una armonía que nos una, conformando una vibración, una sola vibración capaz de atraer de lo Elevado, lo que de lo Elevado deseamos enviaros.
Debemos meditar sobre estos argumentos, que de lo Superior, de los Planos de Luz, nos llegan para contribuir a un más rápido progreso espiritual y evolución.
Sebastian de Arauco