Sucedió hace muchos años
allá en tierras de Judea,
en una pequeña aldea
Llegaron a aquel lugar
una pareja que andaba
en busca de una posada
donde poder descansar.
Y en Belen aquella noche
se cumplió la profecía,
porque vio nacer a un hombre
a quien llaman el Mesías.
Rodeado en la pobreza
de aquel pesebre profundo,
se duerme y se despereza
la futura luz del mundo.
Quien pudiera imaginar,
tan pequeño e inocente,
que pudiera despertar
de su sueño a tantas gentes.
Predicando en todas partes
lo esencial del cristianismo,
«ama a tus semejantes
como amas a ti mismo».
Hoy se postran de rodillas
unos sencillos pastores,
que serán de tu doctrina
los primeros seguidores.
Ojalá esta Navidad
nos trajera a la memoria
que esta pequeña historia
sucedió en la realidad.
Me quedo con todo lo que expones aqui, buenas elecciones poéticas.